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03 agosto 2012

Vamos, hombre ya.


Entrada con banda sonora, por cortesía de Fabián y "Beautiful Girls"
Graduation Day - Chris Isaak (el de Wicked Games, esa canción de Karaoke)



Cuando en época de incertidumbres uno consigue tomar una pequeña decisión que le asegure un poco de luz en el camino que tiene por delante, de golpe las cosas parecen menos feas. Cuando además ve que en esa ruta todo apestaba a mierda y que de golpe todo ello era decorado, que el blanco y negro puede tener ligeros tonos que no son grises, que hay mucho esfuerzo pero también alguna recompensa por ellos, no sólo bajar la cabeza, apretar los dientes y seguir por seguir, las cosas se hacen más apetecibles.

Vivimos tiempos cada vez más difíciles, que van en una progresión cuyo resultado no augura nada mejor en años. Poco o nada de lo que hemos hecho o hacemos ha influido en ello, pero nos vemos inmersos en la vorágine de tristeza y miedo creada por la avaricia de pocos. Amigos, hay cosas que jamás nos pueden chafar. Desde un pequeño ritual que tengamos cada uno en soledad, hasta las risas que se pueden echar disfrutando de una buena conversación. Escapar unos días, ver una buena película ("Batman, The dark knigh rises" queda totalmente descartada... tamaño truño). Mientras todo se va a la mierda ante nosotros, podemos elegir un "que se jodan" épico. Vamos a redescubrir que la felicidad no está en un cacharro, ni en ir sistemáticamente de vacaciones a lugares de playa y piscina con dj; que pese a que hayamos perdido el control sobre gran parte de lo que pensábamos para nuestro futuro, seguimos teniendo la posibilidad de ser razonablemente felices.

Es una visión acomodaticia, de resignación. Pero fuera de las ganas que tengo de proponer un suicidio masivo para que los de arriba se queden sin mulas sobre las que cargar sus muertos y se tengan que poner a trabajar por su cuello de una vez, también van a darse oportunidades para acabar con tanta puta injusticia. Y ahí también va a haber quienes busquen rentabilizar nuestros esfuerzos en beneficio propio. Desconfiad de quienes se autoproclamen líderes de movimientos de cambio, ved que han hecho en el pasado y sobre todo, qué no han hecho y por qué. Cada cual que elija, pero sin engañarse. El gran problema de las revoluciones es que en el curso de los pocos años siguientes, en nombre de los mismos ideales que originalmente todos querían alcanzar, siempre sale alguien que los reconduce hacia una nueva situación que dista mucho de ser la inicialmente deseada. 


Viendo cómo están los Borbones y cómo es este país, 
al final repetimos la de la constitución del '69.


Que de qué estoy hablando... yo que sé. Ayer dos señoras de CCOO me dieron un panfleto para que fuera en septiembre a cercar el congreso, que ellos iban a liderar, junto con otras organizaciones, el cambio. Ahí tenéis el ejemplo de lo que hablo.

En fin, que estoy contento, lo tenía que justificar. Ahora sí. Que os den a todos.

01 agosto 2012

Supina hez

Ayer tuve el placer de disfrutar de varios minutos de una cinta épica: Los señores del acero. Semejante basura pasaría inadvertida para el gran público, pero no para aquellos con cierta tendencia a admirar la maluenidad -entiéndase: pelis tan malas que son buenas en sí (Starship Troopers 1 y 3, Mensajero del Futuro, Waterworld)-, como mi actual compinche Fabián, que tuvo la decencia de hacerme partícipe de que iban a pasarla por la sexta.

Para aquellos que no tenéis vida más allá de Crepúsculo -y no de los Dioses, precisamente; ejem ejem Patrrrrrrrao- os diré que en esta cinta de tintes épicos podemos disfrutar de un ritmazo de 2 pechos cada 5 minutos, violaciones en grupo, tallas de San Martín guiando hacia la ventaja sangrienta, el malo de Platoon atravesando peñica buena con la espada del Cid (Anthony Mann) cuando luchaba por Calahorra-que-parece-Wasintón; y un eterno etcétera de detalles que hacen que en ningún momento te dé por aburrirte. Hasta que pasa media hora, y claro, saturado de tan rica información, decides que ya sabes todo lo que podías llegar a saber de la película, que con eso ya puedes hacer como que la has visto entera cuando te pregunten. Sólo hay que decir... ah sí coño, en la que sale Ávila. Y quedas como un marqués.

Aquí la dama antes o después de ser violada. 
Es una constante así que da igual


Para los que necesiten ávidamente de conocer mis andanzas (Papá, mamá, policía), vuelvo mañana a Burgos para una estancia de un día. Tiramos de DemandaFolk, y luego una semanica en Vitoria. Lo que venga después, no lo sabe ni el Tato, es parte del misterio de agosto, un mes que gusta de irse definiendo según avanza.

Por cierto, la excavación de Navasfrías ha sido un lujazo. Ha pasado de todo y hemos nadado en paTcharán, con lo cual mis objetivos en la vida, que se reducen a la extensión del culto pacharanero-excavatorio, siguen su curso. Veremos cuánto aguantan in da north. Dieta del donut, JA, eso es para gente más gay que un cruce entre Croc (Legend of the gobbos) y el Spyro de Dragón. Ahí lo lleváis.




Los susodichos pensando en aparearse y tener huevos 
para que una Khalessi calentorra se los pase por la piedra.


Y poco más. Dos días, dos actualizaciones. Esto no pasaba desde Antonia (never forget)
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